Raúl de la Cerda

El destapador Chalchíhuitl surge de una interpretación del valioso jade, de su asimilación e inspiración, donde esta piedra para el mundo maya era asociada con lo más valioso: la fertilidad, el poder, la vida, los recursos naturales; el agua y el maíz. Haciendo honor al Chalchíuhatl, que es el agua preciosa de los mayas, aquella que cuenta sobre los sacrificios y su sangre, que brota y que en el ritual, hace que el agua rinda tributo a la vida. El destapador Chalchíhuitl, representa levantar una tapa de la que brotan estos elementos, vida, ánimo, energía en el ser humano, que asemeja un ritual diferente, pero que renace y reconstruye a quien lo realiza. La posibilidad de que en lo interior y en lo más profundo del ser humano, surja un renacer, que destape con la fuerza del verde del jade, la mejor experiencia que es la vida. No es un objeto utilitario en si, es el símbolo de que, en el interior de cada uno, esta la mejor parte.

 

Destapador Chalchíhuitl

Mármol verde tikal

14.5 x 3.5 x 1.5 cm